Chile: Que vivan los estudiantes
Escrito por FRIC- Alternativa Comunista
En Chile, todo está en movimiento. La lucha estudiantil ha detonado un proceso y abierto un nuevo momento político.
Cuando a mediados de los ’80 el pueblo chileno amenazaba con tirar abajo la dictadura, a semejanza de otros países de la región, los partidos políticos acudieron en su apoyo para pactar una retirada ordenada e impedir que la movilización se desarrollara.
La actual Constitución es resultado de ese pacto. Y el sistema educativo viene de allí. Por eso la lucha actual enfrenta al propio régimen político heredero de esa situación. La dureza con que el gobierno anterior de la Concertación#, el falso socialismo de Bachelet, enfrentó la movilización pingüina del 2006 se explica por eso.
2011
Este año comenzó con enormes movilizaciones en rechazo a la represa Hidroaysén, por parte de entidades ambientalistas. Luego, siguió la lucha de casi un mes, de 11 mil mineros subcontratistas de El Teniente, la principal mina subterránea de cobre del mundo, y poco después un paro de toda la Federación del Cobre. Y desde hace 3 meses, la heroica lucha de los estudiantes contra la educación privada.
Esa situación fue deteriorando todo el régimen político. Mientras el Presidente Piñera perdía popularidad hasta el 26%, la Concertación bajaba al 17%, en medio de un gran rechazo a todos los partidos.
En este marco, el Partido Comunista lanzó la lucha con fines electorales, pero se vio superado. Hoy el programa de los estudiantes avanzó más allá de las posibilidades del capitalismo chileno.
Ellos piden “educación estatal, laica, gratuita, de excelencia”, y que los recursos salgan de “la renacionalización del cobre que hoy, en más de dos tercios, está en manos privadas”, con la “socialización de los excedentes, y que se termine el enriquecimiento legalizado de las cuatro familias más ricas que, junto con el capital transnacional, son dueñas de Chile”#.
Crisis en las alturas
El gobierno tenía que parar el incendio. La propia crisis incidió para que cometiera un error de cálculo. Viendo un deterioro del movimiento, aprovechando las vacaciones invernales, y bajo presión del UDI, partido de la derecha pinochetista, intentó una represión ejemplar.
Pero fue como apagarlo con nafta. La clase media, más afectada por la educación privada, salió a “cacerolear”, como no se veía desde los ’80. Y eso realimentó la pelea estudiantil, combinada ahora con la clase media y sectores obreros como mineros o portuarios, que luchan concientemente en forma coordinada con los estudiantes.
Cambio de dirección estudiantil
Los intentos de los dirigentes del PC de la CONFECH por llevar la movilización a la vía parlamentaria, y lograr acuerdos parciales con el gobierno, han llevado a su desprestigio. Van cayendo los dirigentes de las federaciones, y una nueva camada de izquierda independiente, muy enojada con el PC, toma la posta.
Esa camada ha impuesto la consigna de nacionalización del cobre para financiar la educación en el programa de la lucha, ha marchado en forma conjunta y convoca constantemente a los mineros, en especial al SITECO, reivindica la unidad obrera estudiantil.
Y ha detonado una discusión en Chile: si esta educación es constitucional, hay que cambiar la Constitución, para lo cual habría que llamar a una Constituyente.
Perspectivas
La dirección de la CUT, también del PC, había llamado al paro nacional para el 24 y 25 de agosto, previendo que para ese entonces la lucha estudiantil sería un recuerdo. Sin embargo, ahora pueden empalmar, sumando al conjunto de la clase obrera, enemiga de Piñera, al torrente movilizado. Eso es lo que preocupa ahora a todo el establishment chileno.
El horizonte del 11 de setiembre, con un nuevo aniversario del Golpe, fecha en la que siempre se hacen grandes movilizaciones, preocupa a todos los partidos y a la burguesía chilena.
La lucha estudiantil está dibujando un nuevo Chile.
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