Cumbre del Grupo de Río en Costa Rica

Quienes formamos parte de la Liga Internacional de los Trabajadores, llamamos a repudiar este ataque y violación de la soberanía, que deja al descubierto, que Colombia esta preparado para cumplir el mismo papel que hace Israel en Medio Oriente: Ser la punta de lanza del imperialismo, desde donde se ataca sin respetar en lo más mínimo la soberanía de nuestros países, tratando con el nombre de terrorista a cualquiera que enfrente alguna de las ordenes de los “amos del norte” 

Frente a este nuevo atropello, es necesaria una movilización unitaria de masas donde se junten trabajadores y sectores populares para detener esta acción criminal en nuestro continente. Los trabajadores, estudiantes y sectores populares no podemos permanecer callados frente a esta masacre del gobierno de Uribe, dirigida por la mano del imperialismo representado hoy por el asesino de George Bush.

Desgraciadamente países como Ecuador y Venezuela que habían sido muy duros en sus discursos, y sus presidentes, Correa y Chávez, no fueron consecuentes con sus palabras y terminaron de la “guerrilla verbal” al apretón de manos con el asesino de Uribe, que con un “perdón” consiguió salir airoso de la cumbre. Muy apurado, en la propia cumbre, Daniel Ortega de Nicaragua, restablecía las relaciones diplomáticas, que unas horas antes había roto con Colombia

Más de una vez hemos denunciado la inconsecuencia, por su carácter de clase burgués,  de los Gobiernos de Rafael Correa de Ecuador, y de Hugo Chávez de Venezuela, que nos hablan de socialismo, mientras aplican políticas a favor de las burguesías de sus países y como en el caso de Venezuela despiden dirigentes sindicales independientes como el petrolero Orlando Chirino. No se puede esconder esta claudicación, de quienes se han puesto a si mismos, el rotulo los constructores de socialismo del Siglo XXI. Tanto las negociaciones de Paz, del cual Chávez es su principal impulsor, como el show de palabras para la televisión, han dejado muerte y masacre para la FARC y el pueblo Colombiano y Mayor fortaleza para Uribe y el imperio.

Esta Cumbre de gobiernos sometidos, llevada adelante en Republica Dominicana, cuyo gobierno del presidente Leonel Fernández, reprime con sus tropas en forma continúa al pueblo Haitiano, que sufre una ocupación militar, no fue denunciado por ninguno de los presentes.

Por el contrario, Hugo Chávez dentro de sonrisas se puso a cantar “Quisqueya, la tierra de mis amores, de suaves brisas, de lindas flores” animando al anfitrión, que lo aplaudía y luego lo rodeaba ante el apretón de manos de Hugo Chávez y Álvaro Uribe.

Es vergonzoso que quienes tienen posibilidad de llamar a la movilización latinoamericana y demostrar su antiimperialismo en los hechos, expropiando sin indemnización a las multinacionales del imperio en sus países, frente a esta masacre terminen con abrazos, cantos y haciendo de payasos, con los gobiernos que ellos mismos denuncian como fascistas, asesinos, gobierno de narcotraficantes y sometidos al imperio.

Esto no fortalece, sino que debilita la movilización de pueblos de Ecuador y Venezuela y Colombia, y de ninguna manera lleva al socialismo, sino a su derrota segura, y le permite a Uribe salir glorioso.

Mientras Chávez, apretaba la mano de Uribe, en la Cumbre de Río, en Colombia se cometía el asesinato de otro guerrillero, miembro de la cúpula de la FARC, Iván Ríos.

A pesar de no compartir los métodos de la FARC, alejados del movimiento obrero, reconocemos que esta organización expresa la desesperación de miles de campesinos, sometidos por más de 50 años, llevados a la miseria y la muerte. Llamamos a los gobiernos el reconocimiento como fuerza beligerante.

Los trabajadores latinoamericanos necesitamos organizarnos independientemente de estos falsos líderes que como Chávez y Correa hicieron de comparsa del imperio y el gobierno de Uribe y convocamos construir fuertes organizaciones independientes de la burguesía, para enfrentar al imperialismo y sus gobiernos serviles. Basta de socialismo para la televisión y los días de fiesta, Basta de dirigentes burgueses con ropaje socialista.

La Independencia de clase no solo debe ser sindical sino también política

“La liberación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos”