Ser joven hoy, es sinónimo de delito, de falta de interés por el estudio, de descontrol y de excesos. Los ricos y poderosos, los dueños de este país, a través de sus medios de comunicación nos estigmatizan de manera permanente, la mayoría de los jóvenes a estudiamos en salones destruidos, trabajamos con patronales que violan nuestros derechos, y precarizan nuestros empleos. Recibimos los peores salarios y somos mano de obra descartable, en nombre de la “primera experiencia laboral”, del gran negocio que son las tercerizaciones y los distintos contratos precarios. Todo esto si tenemos la “suerte” de conseguir dichos trabajos, y no estamos directamente desempleados.
Los jóvenes en todo el mundo -con distintas expresiones- comienzan a rechazar este maltrato hacia la juventud, esta opresión que lleva adelante el sistema social en que vivimos y que se llama capitalismo. Los partidos Blanco y Colorado tratan de atraer a los jóvenes, con sus elecciones internas, nos dicen que en ellas podemos votar desde los 14 años, mientras con la otra mano quieren bajar la edad de imputabilidad de 18 a 16, ellos dicen que es para los “jóvenes delincuentes”, cuya única respuesta es la “mano dura” y que además luego aplicaran para el conjunto de la juventud si protestamos o luchamos contra todas las injusticias de las que somos objeto.
El Frente Amplio, y los partidos que hacen parte de este frente, nos dicen que son la opción de “izquierda” y que debemos esperar, que esto va cambiar lentamente. También llaman a participar en sus elecciones internas, donde en su gran campaña mediática nos llaman a ser “parte del cambio”. Pero, ¿de qué “cambio” nos hablan estos dirigentes? En estos siete años de gobierno frenteamplista, la situación de la juventud sigue siendo nefasta.
Sus políticas destruyen la educación pública, precarizan nuestros empleos, envían tropas a ocupar países hermanos, mantiene la mayoría de los golpistas y torturadores en libertad y además llevaron al gobierno a los dirigentes de los partidos Blanco y Colorado que el pueblo repudió en las pasadas elecciones.
Ninguno de estos partidos son una salida a nuestros problemas de fondo, a ninguno de estos partidos les interesa luchar por nuestros derechos y nuestros sueños, por el contrario, quieren una juventud dócil que acepte y asimile esta precaria realidad, mientras esperamos los lentos “cambios” siempre prometidos por todos los partidos, pero que nunca llegan. Quieren mantenernos a nosotros los jóvenes dentro de los marcos del capitalismo, que solo ofrece un futuro de miseria para nosotros y la sociedad.
El desesperado llamado de todos los partidos capitalistas a los jóvenes no es injustificado: saben que somos de los sectores más combativos, que cuando nos organizamos y luchamos hacemos temblar los cimientos del sistema, como sucede en Chile, en Europa o en todo el proceso revolucionario de Medio Oriente, donde la juventud tiene un papel destacado. Por eso buscan adormecer nuestro espíritu revolucionario.
Para luchar por la educación pública y de calidad; contra la precarización del empleo; contra la baja de la edad de imputabilidad y la estigmatización de la juventud; para que se juzgue y castigue a todos los asesinos de la dictadura, para ello, te invitamos a organizarte y construir una fuerte Juventud Internacionalista, que tenga por objetivo una salida de fondo a nuestros problemas: destruir este sistema opresor mediante la revolución socialista a nivel mundial.