Que Dalmao vaya a una cárcel común 

No a las cárceles VIP para asesinos y torturadores

Anulación de la ley de Caducidad

 

Por primera vez, un general en actividad fue enviado a prisión por un crimen ocurrido en la dictadura. Se trata de Miguel Dalmao, jefe de la División IV del Ejército. Este procesamiento se da en medio de una discusión en filas del Frente Amplio sobre la posible anulación de la Ley de Caducidad, cosa que va quedando por el camino, ya que Nin Novoa, Saravia y Huidobro, dijeron que no la apoyarán.

Dalmao había sido ascendido a general el 1° de febrero de 2005, el último mes de la Presidencia de Jorge Batlle, un mes después asumiría, Tabaré Vázquez, que le da el destino director de Sanidad Militar y en 2008 lo designa como jefe de la División del Ejército IV, con asiento en Minas, Lavalleja.

La Justicia, basándose en la inconstitucionalidad de la Ley de Caducidad, que se ha declarado para algunos casos, por la Suprema Corte de Justicia,  procesó ahora a Miguel Dalmao y al coronel retirado, José Chialanza, por el homicidio de la militante comunista Nibia Sabalsagaray.

Profesora de literatura, militante del Partido Comunista, Nibia fue torturada y finalmente asesinada el 29 de junio de 1974 estando detenida en el Batallón de Transmisiones N° 1. No fue suicidio, como quisieron y quieren presentar muchas muertes producidas en la dictadura, fue un crimen: "Sometida a diversos tormentos, la detenida falleció"

Dalmao y Chialanza, fueron procesados con prisión, por el juez Rolando Vomero. En los dos casos, a pedido de la fiscal Mirtha Guianze, el magistrado les imputó el delito de "homicidio muy especialmente agravado" en grado de "coautoría".

El comandante en jefe del Ejército, Jorge Rosales, salió a realizar declaraciones públicas en defensa de Dalmao y dentro de la fuerza se habla de nerviosismo. Esto muestra la comprometida situación de muchos militares en actividad y retiro con la dictadura, sus crímenes y torturas.

Aún hoy a más de 37 años del golpe de estado, la impunidad, continúa reinando, a pesar de que algunos casos, fueron excluidos de la Ley de Caducidad. El único camino para que todos los militares y civiles involucrados en la violación de los Derechos Humanos vayan a la cárcel, es el de una movilización que tenga continuidad, para que se juzgue y se castigue a todos los asesinos torturadores y golpistas.

Esta justicia burguesa ha mostrado que es incapaz siquiera de poner en cárceles comunes al puñado de asesinos y torturadores que fueron procesados. Por ello se hace necesario luchar por la creación jurados populares, que estén compuestos por las organizaciones de Derechos Humanos, por Familiares de Detenidos y Desaparecidos, por los Hijos, por la Plenaria Memoria y Justicia, los Sindicatos y el PIT-CNT. Necesitamos Juicios Públicos para que todos conozcan las aberraciones que cometieron y una gran movilización que garantice la cárcel a estos asesinos.    

Por Juicio y Castigo a militares y civiles que participaron de la dictadura
 

Ni ley interpretativa, ni enmiendas

Anulación de la ley de Caducidad

Izquierda Socialista de los Trabajadores LIT-CI